miércoles, 29 de agosto de 2012

David Goldberg J.

Real Estelí no fue una presa fácil para Alajuelense . Ni cerca.
De hecho, a la Liga le costó mucho más de la cuenta ganar ayer en Nicaragua y mantenerse con posibilidades de avanzar a la siguiente fase de la Concachampions .
Lo hizo por 1-0, un marcador vergonzoso seguramente para los que no vieron el compromiso.
Sin embargo, los que sí lo hicieron se dieron cuenta de lo duro que fue romper el cerrojo defensivo del Real Estelí. Sin duda, los pinoleros algo aprendieron de orden táctico en los últimos años.
Además, se veía que conocían de las virtudes erizas: Anderson Andrade nunca pudo girar, pues lo cortaban con falta. Cristopher Meneses y José Salvatierra siempre tuvieron un rival al frente para taparles la salida. Diego Calvo y Allen Guevara no pudieron transportar porque cuando tenían el balón en el pie, les llegaban dos o más.
Alajuelense dominaba la posesión de la pelota casi que a plenitud, pero no podía penetrar. El Real Estelí era feliz esperando, porque ya sabía lo que venía.
Incluso los pinoleros tuvieron una clarísima en un contragolpe, pues la Liga estaba tan posicionada en zona ofensiva que se descuidó.
No obstante, Samuel Wilson, un nombre conocido con goles en Copa Uncaf con su selección, la tiró afuera luego de dejar en el camino al guardameta Dexter Lewis.
Nada funcionaba para la Liga y más bien sufrió de ese susto mayúsculo. Increíblemente, se salvó.
Sin lógica. Pero en estos casos, donde el camino planificado parece estar completamente bloqueado, muchas veces la lógica deja de servir.
Por eso, que el más pequeño de la cancha entrara al área buscando un centro por arriba era tan poco esperado como necesario. También resultó efectivo.
Sorpresa para todos. Una casi al mismo nivel que lo bien que se paró el conjunto nicaraguense: Guevara anotó con un buen cabezazo y le dio ese respiro necesario a los rojinegros en el momento justo para evitar la desesperación (42’).
Normalmente, los goles sacuden el ritmo del duelo. Convierten a uno de los dos en el obligado a buscar el empate. Anoche no fue así.
Real Estelí se mantuvo atrás. No le importó perder por la mínima. La Liga intentó aumentar, pero no dio para más.
Foto: LA PRENSA/O. NAVARRETE